Oración por las mujeres embarazadas para que sus bebés nazcan sanos y felices.

Elias | 23/01/2020 | sermones | No hay comentarios

La mayor ilusión de una mujer es poder concebir hijos, esto lo dan a demostrar desde pequeñas cuando por instinto natural, juegan con sus muñecas y muñecos, les dan su tetero, los acarician para que se duerman, etc. Esto es un instinto natural de cada mujer, al llegar a la edad adulta este instinto se desarrolla aún más, hasta que llega el momento que están preparadas para ser madres.

Pero hay un hecho lamentable que llena el corazón de muchas madres de tristeza esto se debe a las enfermedades congénitas las que afectan a muchos neonatos, y cuando estos nacen deben de luchar con estos síntomas de diversas condiciones de salud, a los que otros no sobreviven a los tratamientos médicos. Muchas de las enfermedades son consecuencias del pecado de los antepasados. Dios le dio una promesa al pueblo de Israel en el libro de Éxodo capitulo 15 versículo 26: “y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador.”

Pero sabemos que tenemos a un Dios misericordioso que se preocupa por el ser humano, a quien debemos clamar por eso dedicaremos las siguientes líneas a elevar una oración a nuestro creador.

Señor Jesús venimos delante de tu presencia a pedirte perdón por todos nuestros pecados, y te damos toda la gloria y la alabanza porque usted es el que la merece. En esta hora levantamos una oración por todas las mujeres que están embarazadas, para que usted proteja a sus criaturas las que están por concebir, que esos bebés nazcan sanos, libre de toda enfermedad, atamos y reprendemos toda maldición generacional, a través del pecado de sus antepasados, declaramos a esos bebés sanos para tu gloria y tu honra. Solo Tú eres poderoso y puedes hacerlo, en el nombre poderoso de tu hijo amado. AMÉN.